Tras varios minutos de suspenso y misterio, finalmente fue revelado al mundo que el cardenal estadounidense-peruano Robert Prevost resultó elegido este jueves como el nuevo papa de la Iglesia Católica.
Tras dos jornadas y cuatro votaciones del cónclave, Prevost resultó electo tras obtener la mayoría (dos tercios o más) de los votos requeridos para ser el nuevo jefe del Vaticano.
Así, tras elegir ser nombrado como “León XIV” (León Décimo Cuarto), hoy se convierte en el sucesor de Francisco (2013-2025), sumo pontífice fallecido el pasado 21 de abril a los 88 años.
Los 133 cardenales electores lo habrían designado tras la cuarta votación de este segundo día del cónclave.
Antes de asomarse por el balcón de la basílica de la Plaza de San Pedro, el nuevo soberano del Vaticano pasó de la Capilla Sixtina a la llamada Sala de las Lágrimas, donde fue investido para presentarse al mundo.
“Nuntio vobis gaudium magnum: habemus papam” (Os anuncio una gran alegría: tenemos papa), dijo el cardenal Dominique Mamberti para anunciar al nuevo papa.
Tras ser presentado, León XIV pronunció un discurso, destacando el legado del fallecido pontífice Francisco, “el papa que bendecía a Roma” y que “daba también su bendición al mundo entero”.
“Permítanme dar continuidad a esa misma bendición. Dios nos quiere mucho, ama a todos. El mal no prevalecerá. Estamos todos en las manos de Dios. Por lo tanto, sin miedo unidos, de la mano con Dios y vayamos adelante”, dijo.
“Seamos discípulos de Cristo, nos precede. El mundo necesita de su luz. La humanidad necesita de él como la fuente para ser alcanzada por el amor de Dios”, añadió.
“Ayúdennos también ustedes, los unos a los otros para construir puente, con diálogo, para ser todo un solo pueblo, siempre en paz. Gracias al papa Francisco”, subrayó.
“Quisiera agradecer a todos los hermanos cardenales que me han elegido para ser el sucesor y caminar juntos como Iglesia unida buscando siempre la paz, la justicia, trabajar como hombres y mujeres fieles a Jesucristo, sin miedo para proclamar el evangelio y ser misioneros”.
“Soy un hijo de San Agustín, agustiniano, que ha dicho ‘con ustedes soy cristiano, y para ustedes obispo’. En este sentido podemos todos caminar juntos hacia esa patria, la cual Dios nos ha preparado”.
“A la Iglesia de Roma un saludo especial. Tenemos que buscar juntos cómo ser una Iglesia misionera, que construye puente de diálogos, siempre abierta a recibir, como en esta plaza, con los brazos abiertos a todos, a quienes tienen necesidad de nuestra caridad y presencia, de diálogo y amor”.
“Si me permiten unas palabras, un saludo, de modo particular, a mi querida Diócesis de Chiclayo, en Perú, donde un pueblo fiel acompañado a su obispo ha compartido su fe y ha dado tanto para seguir siendo Iglesia fiel de Jesucristo“.
Posteriormente, tras decir que “nuestra madre María quiere caminar siempre con nosotros, estar cerca de nosotros, ayudarnos con su intercesión y amor”, rezó un Ave María “por la paz en el mundo” ante las más de 40.000 personas que llegaron hasta la plaza de San Pedro.
Antes de finalizar su presentación, el papa León XIV, visiblemente emocionado, dedicó unas palabras de “bendición” para todos los presentes y quienes siguen la transmisión en el mundo.
El nuevo jefe del Vaticano es el primer soberano de la Iglesia Católica en más de 100 años en elegir el nombre de León para llevar a cabo su pontificado.
Su antecesor, León XIII, fue elegido en 1878 y su período papal se extendió hasta 1903.
Fuente: http://www.biobiochile.cl